martes, 11 de mayo de 2010

Marqués de Griñán

Se nos fue el monarca Chaves. Una pena. Pero la dinastía que se sienta en la poltrona andaluza ha tenido un digno sucesor en Griñán. El Marques de Griñán. Pepito, como él quiere que le llamen para presentarse cercano al pueblo o Jose Antonio o Juan Antonio o como sea para los demás que casi ni sabemos de él su verdadero nombre.

Esta semana ha tenido una intervención excepcional y ha soltado unas perlitas por la boca, que merecen pasar a los anales de la historia. Cuando menos, de este blog.

La mejor de todas ha sido a la juventud, diciéndole que se deje de vivir del cuento con becas y ayudas del paro. Tiene cojones la cosa. Como si estuviéramos los jóvenes tocándonos las pelotas y no quisiéramos trabajar. Como si nos gustara terminar las carreras y tener que ir derechos al INEM. Como si no hubiéramos luchado antes (nervios, sofocones y noches en vela lo saben) por aprobar todos esos créditos que te exigen para demostrar que eres merecedor de una beca, que en muchas ocasiones acaba resultando irrisoria.

De todas formas, él siguió tan pancho. Y ahí no quedó el asunto. También pidió a los ciudadanos lo del esfuerzo y el arrimar el hombro. Eso que tan de moda está ahora y que los políticos no han hecho en su puta vida.

Mientras, se ha gastado un dineral en restaurarse un palacio para gestionar desde allí los asuntos de nuestra vida cotidiana. Sólo en lamparitas se le han ido más de ocho mil euros. Pero eso no es lujo. Eso es cercanía al pueblo, y a llamarse Pepe, que esto por la Andalucía imparable. Y luego, a pedir el esfuerzo a los ciudadanos.

Déjense de milongas, y de nuevos eslóganes con su cara. Ya nos tragamos el de "Andalucía Imparable" y Andalucía está parada. Y ahora nos pone lo de "Cambiamos con Andalucía" y en esta tierra hace ya treinta años que no cambia nada. O sí. Que las urnas pueden tumbar a la dinastía en las próximas elecciones. Por más que se crea eterna.

Están ahí para solucionar problemas y no hacen más que eludir responsabilidades. Se les vota para que gobiernen y cuando sobrevienen los problemas no saben gobernar. Arrimen el hombro ustedes, recorten de sus gastos oficiales. No nos pida arrimar el hombro y trabajar cuando ustedes están sumidos en la inoperancia. Y encima, en un palacio. ¡No cuente conmigo, Marqués de Griñán!

1 comentario:

  1. Nada nuevo bajo el sol. Es lo que le pasa a la gente cuando se acomoda y los dejan.

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